Dossier sobre Sexualidad y Homosexualidad

©Fundación Triángulo 2001

CAPÍTULO 6: VALORACIÓN TEÓRICA

  • Introducción
  • El Informe Kinsey
  • Conclusiones
  • Introducción

    Actualmente se han vuelto a retomar las razones biológicas como explicaciones fundamentales de la homosexualidad.

    Últimamente se ha hecho especialmente famosa la teoría que plantea que el hipotálamo de los homosexuales es diferente al de los heterosexuales.

    La ciencia no es neutra, y cada estudio que se realiza pretende una finalidad concreta. El estudio sobre el hipotálamo fue desarrollado por un investigador homosexual de EE.UU., con la finalidad consciente de eliminar la culpa que se atribuye a los homosexuales y trasladarla a la biología y así conseguir apoyo del Estado para estas personas. Es evidente que si la homosexualidad está programada genéticamente no se puede culpar a nadie por tener deseos homosexuales. Este ejemplo nos demuestra que siempre hay que intentar ver más allá de lo que plantea una teoría. La ciencia nunca es neutra, ya que los científicos que la construyen son humanos.

    Pero hay que ser conscientes de que unos mismos resultados pueden ser utilizados de formas muy diversas. Tal vez este investigador logre su objetivo y consiga que la Administración de EE.UU. declare a los homosexuales objeto de atención especial, pero con toda seguridad el gobierno de Hitler habría utilizado esta misma justificación para una finalidad muy diferente.

     

    El Informe Kinsey

    Entre 1937 y 1948 Alfred Kinsey realizó el mayor y más completo estudio sobre sexualidad masculina. Logró reunir datos de un total de 17.000 hombres, por lo que se considera el estudio estadístico más fiable nunca realizado sobre el tema. De la muestra estudiada Kinsey extraía las siguientes conclusiones:

  • El 50% de los hombres son exclusivamente heterosexuales, sin contactos ni fantasías homosexuales de ningún tipo.

  • Un 13% de los hombres siente ocasionalmente cierta atracción erótica hacia otros hombres.

  • Un 37% ha tenido alguna relación homosexual con orgasmo en su vida adulta.

  • Un 25% de los hombres tienen experiencias y deseos homosexuales que van más allá de lo puramente ocasional.

  • Un 18% tiene tantos deseos homosexuales como heterosexuales.

  • Un 13% es definitivamente más homosexual que heterosexual.

  • A un 10% puede considerársele exclusivamente homosexual.

  • Del estudio de Alfred Kinsey (1953) sobre la mujer se deriva la conclusión de que la incidencia de la homosexualidad entre mujeres es considerablemente menor que entre los hombres, aunque también apunta que las mujeres tienen una sexualidad más polimorfa y variada.

  • Sólo el 13% de las mujeres han tenido deseos o experiencias homosexuales.

  • Exclusivamente homosexuales sólo puede considerarse al 6% de la muestra.

  • Estos datos han sido confirmados de forma general por estudios más recientes.

     

    Conclusiones

    Partiendo de esta información parece confirmarse que la sexualidad, repitámoslo otra vez, es más compleja de lo que siempre habíamos creído. Así, es difícil hablar ya de dos grupos de personas, según su objeto de deseo sexual. Más bien deberíamos plantear la sexualidad humana como un complejo y cromático continuo que va desde la heterosexualidad exclusiva hasta la homosexualidad exclusiva.

    Según los datos de estos estudios la mayoría de los individuos se encontrarían en los estratos intermedios de las dos tendencias. Muy probablemente es la sociedad la que por medio de la educación y los modelos presiona más para que los individuos que no se encuentran en los extremos del continuo, acepten de forma incuestionable su papel como heterosexuales.


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    -1.La sexualidad es más que sexo--2.Somos seres sexuados--3.De dónde nace el concepto--4.Mujeres y hombres- 5.Teorías--6.Valoración teórica--7.Rasgos comunes- 8.Una nueva socialización--Bibliografía y enlaces-
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    El Informe Kinsey levantó gran polémica en el momento de su publicación. La sociedad americana de los 50 no podía aceptar que la visión maniquea que mantenía sobre los comportamientos sexuales fuera errónea.

     

    Pero el estudio Kinsey también altera la idea que muchos homosexuales mantienen de su mundo y de las otras personas homosexuales. Después de Kinsey ya no se puede hablar de personas homosexuales, sino de personas que mantienen relaciones homosexuales. Una persona puede tener este tipo de relaciones durante un periodo de su vida y heterosexuales durante otro, incluso puede que coexistan ambas.