Una historia que comenzó a escribirse a principios del Siglo pasado, pero que empezó a contarse a finales del mismo. El 12 de octubre de Itauguá, es uno de los clubes más queridos de las provincias paraguayas, que además ha marcado un antes y un después en su región. Este mismo equipo es el que le regresó las alas a un fénix caído, el lugar donde Salvador Cabañas pudo al fin resurgir en el mundo futbolístico.
El año fue 1914, Europa se encontraba inmersa en la entonces llamada Gran Guerra, el conflicto bélico más grande hasta el momento acababa de comenzar. La historia era distinta en la pequeña ciudad de Itauguá, pues a poco más de dos semanas que iniciara la lucha, en la mente de los locales sólo cabía el hecho de que aquel 14 de agosto nacería su equipo, aquel que llevarían en la piel y el corazón en los años por venir.
La ciudad tenía que verter sus esperanzas y su pasión en un símbolo y qué mejor que un equipo de futbol propio, para no tener que viajar 30km hasta Asunción o bien tener que apoyar al cuadro de las cercanías. Todo estaba listo, sólo faltaba el nombre y a los fundadores les pareció que esa llegada al futbol de su país, su inmersión en un territorio desconocido para ellos, era como cuando Cristobal Colón luego de un largo viaje llegó –sin saberlo- a un nuevo mundo, por ello el nombre ’12 de octubre’ quedaba como anillo al dedo.
El andar del club en el futbol guaraní ha sido sinuoso y escarpado, vieron la luz por primera vez en 1914, pero la esperanza de acceder al máximo circuito de su futbol se quedaba sólo en eso, una esperanza que vio a muchos quedarse en el camino con el anhelo de algún día ver a su equipo en lo más alto. Tendrían que pasar 83 años para que el 12 de octubre figurara en las marquesinas de la cima futbolística paraguaya.
1997 fue el año que marcó el ascenso a Primera División del cuadro paraguayo y los años siguientes el nombre del equipo empezaría a sonar en América, aunque fuera de manera indirecta. Tan sólo un año después de llegar al máximo circuito, un joven Salvador Cabañas vería su debut en Primera División y pocos se imaginaban lo que significarían esos primeros pasos de Cabañas para el balompié guaraní.
El tiempo seguía pasando y el suelo seguía fértil, 1999 vio la llegada ahora de un aguerrido defensa que responde al nombre de Darío Verón. La lista de jugadores que posteriormente serían bien conocidos en el futbol mexicano aumentaría con el debut de Fredy Bareiro en 2001.
Para el 2002 el equipo haría historia y es que con los jugadores ya mencionados y de hecho un gol del ahora defensor Puma, el 12 de octubre se convirtió en el primer equipo del interior de Paraguay en conquistar la gloria del futbol guaraní con su primer y hasta el momento único título de Primera.
Luego la luz se fue apagando, entre problemas en la cancha y financieros, 2009 fue el momento en que el club tuvo que despedirse de la Primera División. La racha negativa continuaría, pues un torneo después tendrían que visitar el tercer escalón del futbol de su país.
La tragedia sonó en México, Salvador Cabañas había recibido un disparo en la cabeza y el club cuyo pasado era tan estrecho con el jugador se estremeció. Tiempo después y luego de largas sesiones de rehabilitación, el ‘Mariscal’ Cabañas podía regresar al terreno de juego y lo que muchos vieron como un riesgo innecesario, el club que lo vio nacer, volvió a darle una oportunidad, para regresar de sus cenizas.
Cabañas y su regreso al 12 de octubre se vio envuelto en la polémica desde el inicio, la cual se intensificó luego de que su técnico Rolando Chilavert decidiera no seguir con el proyecto si le obligaban a alinear al ex jugador americanista. El cambio tuvo resultados positivos para el club, pues incluso con la llegada de Saturnino Arrúa, pudieron regresar a la Segunda División en su ambición de llegar una vez más a la cima futbolística.
Celebrando el día de la Raza, los paraguayos pueden sonreír por estar un peldaño más cerca del retorno del sueño, con un símbolo que prácticamente regresó de la muerte y cuya presencia trajo de regreso la esperanza a su equipo y afición.
pues muy mala noticia