Martes 15 de marzo de 2016 | 02:50 hs
Foto de archivo. Poy se lamentó por los puntos que se le escaparon al Tomba y dijo que “hubiera sido lindo hacer el gol y ganar”, por su pasado en Central.
martes, 05 de diciembre de 2006Si bien en el Expreso hay muchos ex Newell's, el que tuvo un partido especial ante la Lepra rosarina fue Mauro Poy, quien desde que entró al Coloso del Parque Independencia fue silbado e insultado por la gente rojinegra.
De todas maneras, eso no amedrentó al delantero rosarino que convirtió el 2-0 y lo gritó con todo. “En mi partido especial creo que me fue bien, quedé contento por el gol pero, más allá de eso, lo importante era ganar y no pudimos. El gol lo grité con el alma, porque fue especial por mi pasado en Rosario Central, pero lamentablemente no sirvió para ganar. Hubiera sido lindo hacer el gol y ganar. Menos mal que no lo hice de palomita. Si lo hacía de palomita me tienen de acá a 100 años repitiendo el gol cada tanto, como a mi viejo”, aseguró el delantero hijo del legendario Aldo Pedro Poy... el papá de Newell's Old Boys.
Sobre el partido, Poy aseguró que se les escapó la chance de sumar por primera vez de a tres fuera de Mendoza, al comentar que “Newell's nos fue metiendo en nuestro arco y nosotros pecamos por meternos un poco atrás y no aguantar el partido más arriba. Fuimos a Rosario a ganar, pero no pudimos. El partido se había presentado para ganarlo, con un 2 a 0 a favor y las posibilidades de manejar el partido. Tuvimos todo para conseguir los tres puntos de una vez por todas jugando de visitante. Ahora nos queda ganar el próximo partido con Racing y terminar un poco mejor el Apertura. No tuvimos suerte en muchos partidos, pero ya pasó y tenemos que ver que estamos comprometidos con el descenso”, finalizó el atacante, que suma tres pepas en el torneo.
