* En el
rescate de Figueroa sólo cayó un guerrillero
Pide David Cabañas que
se investigue si el Ejército enterró campesinos en La Pascua
* Uno de
los integrantes de la comisión de combatientes que custodiaba a Figueroa, y
hermano de Lucio, dice que Elías Alcaraz miente cuando dice que el Ejército
enterró a 50 guerrilleros * Considera que los enterrados pueden ser
campesinos sin vínculos con el Partido de los Pobres t Señala la
declaración del militar es una confesión sobre su participación en una
masacre
Víctor
Cardona, corresponsal,
Atoyac de Alvarez En el combate que
se dio con el Ejército en La Pascua, el 8 de septiembre de 1974, “sólo
hubo una baja por parte de la guerrilla de Lucio Cabañas, que fue Sixto
Huerta, Sabás, quien tenía
órdenes de matar a Rubén Figueroa Figueroa de darse una situación como la
que se dio”, afirma el ex combatiente del Partido de los Pobres, David
Cabañas Barrientos.
David
Cabañas, hermano de Lucio, fue integrante de la comisión de 40 guerrilleros
encargados de custodiar al entonces senador Rubén Figueroa Figueroa,
secuestrado por el Partido de los Pobres y rescatado por tropas del Ejército
después del ataque al campamento guerrilleros en La Pascua.
En
entrevista, contesta a las declaraciones que hizo el mayor Elías Alcaraz,
quien estuvo al frente de las operaciones para rescatar a Figueroa Figueroa, y
que dice que en La Pascua el Ejército enterró a unos 50 guerrilleros, que
según él murieron en el ataque del Ejército contra el campamento del
Partido de los Pobres
Cabañas
afirma que los guerrilleros combatieron y después se dispersaron, excepto
Sixto Huerta, originario de El Porvenir.
David
Cabañas Barrientos, que fue entrevistado por vía telefónica, es actualmente
secretario de Relaciones del Comité Nacional de la organización política
Izquierda Democrática Popular. Estuvo en la cárcel 8 años y 3 meses de 1990
a 98, cuando perteneció al Colectivo de Presos Políticos del Partido
Revolucionario Obrero Clandestino Unión del Pueblo-Partido de los Pobres
(PROCUP-PDLP).
Miente
el mayor Elías Alcaraz
El ex
guerrillero consideró que son demasiadas bajas las que menciona Elías
Alcaraz, en una entrevista publicada en El
Sur, del 22 y 23 de septiembre, y si enterraron tanta gente en La Pascua
lo más seguro es que haya sido gente de la población civil que detuvo el
Ejército en las comunidades de Atoyac.
Remarcó
que la única baja que tuvo la guerrilla ese día el 8 de septiembre de 1974,
fue Sixto Huerta quien entre sus compañeros era conocido como Sabás por eso miente Elías Alcaraz pues no pudo haber sido un
número de bajas tan grande.
Dice que
Elías Alcaraz en esta nota se está declarando culpable de genocidio, porque
pudieron haber hecho una masacre de campesinos inocentes para demostrar ante
sus superiores que hicieron justicia. “Es posible que se hayan llevado
muchos campesinos de los pueblos y los hayan asesinado para justificar y esa
gente es la que pudieron sepultar ahí”.
Cabañas
pidió que un agente del Ministerio Público Federal se traslade al lugar en
mención y haga una investigación, pero bajo la supervisión de organismos
internacionales de derechos humanos y de las organizaciones no
gubernamentales. Dijo también que las comunidades de la región deben
organizarse para ir a La Pascua a confirmar, porque pueden ser campesinos de
sus pueblos que nada tuvieron que ver con la guerrilla los que estén
enterrados ahí.
Pidió a
las organizaciones no gubernamentales que se organicen, con el apoyo de
organismos internacionales de derechos humanos, para desenterrar los cuerpos
que dice Elías Alcaraz. Porque sólo desenterrándolos es como se va a
confirmar y se va a saber cómo fueron muertos, si por bala, por asfixia o por
cualquier otra forma que les hayan dado muerte.
Consideró
David Cabañas que el mayor Elías Alcaraz solo se está declarando culpable
de los delitos que cometió, con su sola declaración amerita que se le
interponga una demanda ante una Agencia del Ministerio Público Federal,
porque Elías Alcaraz debe saber que el genocidio es un delito que no
prescribe. Y debe perseguírseles por delitos de lesa humanidad, como la
desaparición.
Señaló
que como Elías Alcaraz hay cientos de oficiales del Ejército que cometieron
muchos delitos en los setentas por eso debe haber una investigación profunda
para dar con los responsables. No sólo dar con oficiales como Acosta Chaparro
sino con aquellos que les otorgaron el ascenso y los hicieron generales es
decir también los presidentes de la República son genocidas y también se
les tiene que sentar en el banquillo de los acusados, y si en México no hay
justicia, entonces hay que recurrir a la justicia internacional como El juez
Baltasar Garzón y a la ONU para que se proceda y se sancione a estos
oficiales genocidas, dijo David Cabañas.
A
Lucio Cabañas lo desaparecieron muerto
Invitó
a la sociedad, a las organizaciones no gubernamentales y a sus ex compañeros
a no olvidar. Al enterarse de la invitación que ha estado haciendo Arturo
Gallegos para que todos los ex combatientes escriban su memoria, dijo que el
también le puede entrar pero bajo la condición que la gente que participe en
este esfuerzo sea gente limpia y que todavía estén comprometidos con la
lucha de mejorar las condiciones de nuestro país.
Señaló
que en su caso ya no está en la lucha armada, pero sigue en la lucha legal
consecuente con sus principios, sigue estando convencido que hay que luchar
para conseguir un futuro mejor para México. Dice que la lucha que comenzaron
hace muchos años, tiene continuidad si las condiciones no cambian. Si las
cosas siguen igual en nuestro país no tienen para cuando parar.
David
Cabañas Barrientos, consideró que su hermano mayor, Lucio Cabañas
Barrientos, es el principal desaparecido porque el gobierno nunca ha querido
decir donde quedó el cadáver, con la diferencia que a Lucio lo
desaparecieron muerto y a la mayoría de los campesinos que el Ejército se
llevó los desaparecieron vivos y padecieron las más espantosas torturas.
Dijo que
es mentira que a Lucio Cabañas lo enterraron en Atoyac como lo dijo el
Ejército en su momento. “Lucio Cabañas medía un metro con 65 centímetros
y no podría caber con todo y ataúd en una fosa de un metro con 50
centímetros que hizo el Ejército donde dijeron que lo habían enterrado en
el panteón de Atoyac”.
Señaló
que realmente no existe ese entierro y no se sabe dónde dejaron el cadáver.
“A Lució lo desaparecieron muerto y a otros los desaparecieron vivos”.
Manifestó que la familia, sus ex compañeros y un gran sector de la sociedad,
siguen exigiendo que el gobierno les diga dónde quedó el cadáver de Lucio
Cabañas.
Retomando
el tema de la declaración de Elías Alcaraz, dijo que con lo que esto
declaró es suficiente para acusarlo y para que este mayor nunca salga de la
cárcel.
David
Cabañas Barrientos tenía 27 años cuando formaba parte de la comisión de
cerca de 40 guerrilleros que cuidaban al senador Rubén Figueroa Figueroa que
había sido secuestrado por el Partido de los Pobres. Era menor que Lucio,
quien iba a cumplir 38 años cuando murió en combate en El Otatal, municipio
de Tecpan de Galeana, el 2 de diciembre de 1974; nació el 15 de diciembre de
1936.
Dice que
en el combate del 8 de septiembre de 1974 en la Pascua, no sabe cuántas bajas
tuvo en Ejército, pero de lo que sí está seguro es que el único que murió
de parte de sus compañeros guerrilleros fue Sixto Huerta quien tenía
órdenes de matar a Rubén Figueroa en caso de caer en una emboscada.