12-12-2007

Espacios cerrados, censura por todos lados: Eliseo Reclus y su concepción anarquista de la Geografia


Por Felipe Rodriguez

E
n el desarrollo de la geografía institucionalizada ha habido un vasto derrotero teórico, este se ha ido configurando y reconfigurando a través del transcurso del tiempo y de la sociedad. Por esto, se puede decir que la geografía ha tenido diversos desarrollos que corresponden también, análogamente, a las perspectivas epistemológicas que se han ido produciendo y aplicando en la disciplina. En este trabajo, pretendo introducirme en el marco epistemológico-teórico-geográfico del autor anarquista Eliseo Reclus, cuyo trabajo disciplinar se contextualiza en el siglo diecinueve: cual está caracterizado por el auge del desarrollo industrial y constitución de los estados nacionales en la Europa moderna. Se puede apreciar, someramente, que el paradigma hegemónico que dominaba durante el siglo diecinueve se remite a la filosofía positiva, cuyo mayor representante en la disciplina geográfica es Frederich Ratzel. Por esto, desde la mirada de Reclus, situado desde el enfoque teórico del anarquismo, se configura un tensionado diálogo entre estos dos autores, por lo que las siguientes palabras se tienen que entender en la resilencia de estos dos representantes de la geografía.
En el contexto decimonónico, la concepción anarquista y revolucionaria está siendo vilipendiada por los grandes organismos del poder, de facto, la institución del estado-nación es uno de los principales represores de los sucesos revolucionarios. En esta lógica, la geografía anarquista esta siendo constantemente ostracisada en los turbulentos parajes de la oscuridad, ya que su concepción del espacio geográfico es un elemento en el cual se establecen las luchas de poder que los individuos realizan en el escenario de la sociedad. En consecuencia esto, de que la geografía positivista señala que el espacio es neutro y cuyo discurso sirve para invisivilizar lo político del espacio geográfico. Además, hay que entender que la escuela geográfica ratzeliana esta trabajando para el estado-nacional-imperialista de Alemania, en el cual, en su "geopolítica" realiza la noción de espacio vital e interpreta la noción de selección natural darwinista exterminativa; donde empapado por el determinismo, una nación necesita espacios que garanticen recursos que permitan una libertad en el accionar político interno; asimismo se justifica, a través de leyes, la práctica del expansionismo imperialista de Alemania, quienes anexionan territorios que no estaban en su condición primigenia, y en consecuencia, reduciendo y perjudicando la localidad cultural afectada.

En contraste con el discurso ratzeliano, la geografía anarquista de Reclus, sostiene un discurso totalmente adverso. A continuación pasaré a señalar los principales preceptos teóricos geográficos de este autor. Previamente, hay que tener en cuenta que el discurso de Reclus tiene aportaciones de otro geógrafo anarquista ruso, Potrr Kropotklin.
El discurso de Reclus son palabras que se configuran entre el sueño, la poesía y la realidad, donde lo empírico tiene un gran valor para poder entrar en el camino de aquel sueño anarquista; asimismo, las palabras están constituidas de una frondosidad insurrecta que se encuentran matizadas por su sencillez y su rechazo al lenguaje académico que se encierra, narcisisando la disciplina y construyendo un parangón hacia la difusión de la geografía y del ideal anarquista. La concepción anarquista de Reclus y su texto con mayor representatividad política, es el que se denomina "Evolución, revolución y el ideal anarquista", en el cual establece, y en el contexto de discursos que pregonan la evolución, que aquél concepto es el movimiento incesante de la historia, en el cual los ideales de igualdad, fraternidad y libertad que se pregonaron en la revolución francesa se han estancado, y con ello también la evolución incesante que se requería para la felicidad humana. Es más, las premisas de la revolución se quedan en el camino; y al otro día, los mismos que adulaban la libertad, están inclinados por la tradición y el establecimiento del tiempo, que el cambio producido se conserve en nombre del progreso; que vuelvan los reyes, las instituciones represivas, gritan ¡que este es el progreso!; mientras el pueblo, aquellos agentes que sí fueron el motor de la revolución se observan tristes, secos y llanos a la ignorancia, demandando a las promesas que no se esfumen, a cambio reciben indiferencia y represión de parte de los dirigentes de la revolución, cuales se han trasladado de sitial, en donde ahora dominan, dirigen y esclavizan, confabulados y amparados en el consenso con quienes otrora estuvieron en la vereda de enfrente.

Según Reclus, "la evolución es el movimiento infinito de cuanto existe, la transformación incesante del universo y de todas sus partes desde los orígenes eternos y durante el infinito del tiempo" [1], pero que esto no se contrapone a la revolución, ella es un cambio estrepitoso del tiempo, en el cual la aceleración del tiempo transfigura el acontecimiento, pero que, sin embargo, esta imbricado en la evolución del tiempo. Asimismo, la revolución puede ser regresiva o progresiva, ya que no todas pueden ir hacia el camino de la justicia [2]; Sin embargo la evolución seguirá, no hacia el ideal, pero si virará por algún camino sea este el caso de una revolución regresiva. Por lo tanto, el matiz negativo que tiene la palabra revolución no tiene sentido, ya que como señale antes, aquellos que pregonaron la revolución francesa conservan después de aquel acontecimiento el cambio ocurrido. Sin embargo, un nuevo sujeto ético aparece con Reclus, el obrero y campesino, que se manifesta en contra de aquel que lo violenta. Es el hermano campesino, que es subyugado por los sacerdotes, los señores, los magistrados, todos con la complicidad de la policía y el ejército; el mismo al cual se le expropiará la tierra que trabaja, aquella tierra que ama y en la cual se sustenta su diario vivir para sus generaciones venideras. Aquel hombre y la tierra no pueden ser expropiados, el campesino comparte sus frutos producidos con la gente que lo necesita, y no lo vende o cambia por nada como sí lo hacen los sujetos movidos por el poder y su acumulación. ¿Pero cómo hacer para que no lo expropien? ¡Organización! diría Reclus, la organización es el modo de articulación para que los campesinos se unan en contra de los hombres capitalistas, quienes sólo buscan vender todo para seguir acumulando riquezas.

"Asociaos con los compañeros cuyas tierras están amenazadas con las vuestras por el usurero, los grandes especuladores agrícolas y los aficionados a las grandes cacerías, cuya tendencia es convertir en bosques todos los campos roturados; olvidad las pequeñas rivalidades entre vecinos y agrupaos en comunidades en las que todos los intereses sean solidarios y cada puñado de tierra tenga como defensores a todos los miembros" [3]

Siguiendo con las propuestas teóricas de Eliseo Reclus, su viaje a América fue muy significativo, ahí muestra aquella noción de difusión de una geografía alternativa. Se podría calificar que el fragmento de un viaje a Nueva Orleáns (1855), que aparece en una compilación de textos de Reclus, titulado "Geografía como metáfora de la libertad", es un diario de viaje en el cual expresa el sueño anarquista y la imaginación. Éste, está acompañado de conceptos teóricos de la geografía que sirven como canal de difusión disciplinar, cual no va dirigido al espectro exclusivo y poco ventilado de la academia; y se valdrá de un relato que vuelve permeable a la geografía para el sujeto común y corriente: obreros y campesinos tomarán consciencia del carácter ilegítimo de la violencia que han sufrido históricamente a manos del dueño de la tierra. También, en este mismo texto, señala la problemática racial del siglo XIX. En esta parte, se puede encontrar a una tensionada crítica contra aquellos que abogan la subyugación de las razas y su intrumentalización como esclavos, que aquellas están precarias y van a sucumbir por su estado de naturaleza, ya que en contraste de las civilizaciones que han desarrollado mayores medios para su desenvolvimiento, están en un estado vulnerable ante las nuevas configuraciones de la civilización. Que éstas se encuentran destinadas a depender de otros y por eso a ser su servidumbre. Ante tal, Reclus pregona su descontento contra los esclavistas que en Nueva Orleáns, tienen esclavizados a los hombres y mujeres de raza negra: "así, dicen los esclavistas, así lo quieren, según ellos la causa misma del progreso, las doctrinas de nuestra santa religión, las leyes mas sagradas de la familia y la propiedad" [4]. En esto, el Estado, la iglesia, la familia y la propiedad son aquellas instituciones que se mantienen sobre el concepto de autoridad que tienen unos hombres sobre los otros; por lo tanto, para Reclus, cualquier institución que se sostenga bajo la premisa de la autoridad hay que soslayarla, ya que ésta violenta a los sujetos y coarta el desarrollo libertario e igualitario de los humanos; y es allí donde se alimentan los intereses y la lucha constante. Hay que entender, que la utopía de Reclus, es aquella sociedad libre, igualitaria y en armonía, en consecuencia, la autoridad de unos hombres sobre otros, lo que hace es seguir con aquel eterno retorno hacia la diferencia y la violencia que existe entre los humanos. Asimismo, la educación es una institución fuertemente atendida por Reclus. Dirá que la institución no puede servir para tutelar y demarcar, por medio del profesor, el desarrollo del aprendiz, pues el condicionamiento propinado por profesor e institución lo que hace es coartar la posibilidad de la emergencia de un conocimiento propio, una creación original; su propia poiesis

Para finalizar, he querido dejar el enfoque que sostiene reclus para entender la geografía física. Acostumbrados a visualizar por la tradición, que los fenómenos son distintos. Lo que hace Reclus ante esto, es declarar la dependencia mutua de todos los fenómenos naturales, pero también entendiéndola como metáfora en un contexto social. En "las fuerzas subterráneas" y específicamente en el capítulo sobre los volcanes deja en claro que los fenómenos naturales están imbricados entre si, y así mismo lo sostiene en "el arroyo" y "la montaña", donde se puede entender el cause de un arroyo desde su inicio en una gota de agua. En el texto anteriormente citado, los volcanes son un proceso de dependencia mutua, y lo deja en claro, en el acontecimiento que ocurre sobre la erupción de volcanes, donde seis de ellos configuran un nuevo paisaje, y en el cual, por supuesto, no puede quedar ajeno la actuación del humano en aquel escenario, que como "un hermoso espectáculo, hay gente que sufrió la perdida de sus casas que se encontraban en la ladera del valle en la cual transcurre el cause del rió de fuego, pero que mientras para unos es la desgracia, para otros es un hermoso espectáculo" [5]. Además, quisiera aprovechar, una conceptualización teórica que señala Kropotklin sobre este mismo tema, pero que lo denomina "el apoyo mutuo". En este texto, Kropotkin señala que el apoyo mutuo va ligado con la teoría de selección natural darwiniana, que la evolución de la raza humana se produjo por el apoyo muto entre ellos, y que a ello se debió que una raza sobreviviera y evolucionara ante la naturaleza.

En el aspecto epistemológico, la posibilidad del conocimiento de reclus esta imbricado de un dogmatismo, ya que no se cuestiona la relación entre el sujeto y el objeto. Y lo que hace es describir un objeto, sin cuestionarse si ese objeto es aprendido o no. En cuanto al origen del conocimiento, puede decirse que este se origina en base de un apriorismo, puesto que para presentar la geografía y acontecimientos sociales que ocurren en Nueva Orleáns se basa en los argumentos teóricos de geografía física, no obstante, para aplicarlos necesita de una base empírica; por lo tanto, dado el estudio que antes realizó, al parecer, en Universidades Europeas, las ideas teóricas son convergentes con la experiencia que está viviendo en Nueva Orleáns. Ahora bien, sobre la pregunta de la esencia del conocimiento, cuesta encontrar una línea epistemológica en la cual se encuentre con la realidad, ya que hay un ideal anarquista dando vuelta, que en ultima instancia, es el matiz que hace del trabajo de Reclus uno distinto al de los tradicionalistas; y será claro, por ello, entender el razonamiento de que los fenómenos naturales son dados por la dependencia mutua. ¿Qué hacemos con la realidad, si decimos que ésta no puede cambiar y no depende de la consciencia? El utopos anarquista es el móvil para cambiar la realidad, es la práctica, y por lo tanto el conocimiento idealista, ya que la realidad fue una construcción realizada por la conciencia, y por lo tanto idealista.

Ahora bien, la critica a Reclus, sería basada en contra de su concepción de Educación. Si la educación es un mecanismo de poder, ¿cómo hacer que este instrumento sea la vía para la liberación de la subyugación del poder? Basándome en Foucault, la educación sería uno de los tantos mecanismos que funcionan juntos para disciplinar al sujeto, y sumando la cualidad de redes de poder, todas llevarán esta tarea de disciplinamiento. Por esto, para construir una educación con ideales anarquistas, es necesario construir un discurso con las premisas a fines; como también introyectarse y dominar la conciencia de un sujeto. ¿Como entender entonces la educación sin autoridad o tutela? ¿Es inevitable acaso, la autoridad o tutela para la enseñanza- aprendizaje y guiar por buen camino aquella invención maravillosa de la que habla Reclus, aquella poiesis en otros términos? Creo, desde mi perspectiva hacer movilizar la función de horizonte que pregona Gadamer, en el cual el alumno, como el profesor se entornen en un lugar hermenéutico y sea posible el diálogo. Sin embrago, sería un anacronismo exacerbado señalar lo anterior, ya que Gadamer se encuentra escribiendo en una época sucesora a la de Reclus. No obstante, para los jóvenes anarquistas de nuestros tiempos, resulta una buena práctica realizar aquella función de horizonte.

En segundo lugar, la pregunta va guiada, a si la dependencia mutua es algo inmanente al ser humano ¿Son acaso reminiscencias de algunas ideas racionales anteriores al humano? Desde el Liviathan de Hobbes, lo que se necesita es tener un contrato y entregarle la autoridad a un ente que regule las acciones humanas, ya que para poder contener las fuerzas "animales" que tiene el humano se necesita un ente normativo que evite la muerte entre todos. Y desde el pensamiento freudiano, la cultura misma es coercitiva y ésta inhibiría las pulsiones de muerte.

Para finalizar, señalar que Reclus es un importante difusor de la Geografía anarquista. Por esto, la unión de los aportes más importantes de Reclus fueron: i) llevar la Geografía a los parajes más oscuros de la sociedad; ii) arrastrar el conocimiento a los sujetos populares de la sociedad industrial; iii) el imposible de la Geografía como una disciplina neutra, cual es sumamente política; y por lo tanto un arma de lucha en una sociedad injusta y desigual.


Obras consultadas por el amigo y vistante Felipe Rodriguez

Bibliografía citada

[1] Reclus, Eliseo. Evolución, revolución y anarquismo. Editorial proyección, Buenos Aires, 1969. Pág. 7

[2] Ibidem. Pág. 13

3] Reclus, Eliseo. A mi hermano el campesino. Traducción Daniel Hiernaux-Nicolas. En: Geografía como metáfora de la libertad. (Primera edición). Plaza y Valdés, s.a de c.v. México, 1999. Pág. 54

4] Reclus, Eliseo. Fragmento de un viaje a nueva Orleáns (1855) Traducción Daniel. 1999. Pág.75

5] Reclus, Eliseo (1938). Las fuerzas subterráneas. Traducción Roberto Robert. Ed. Valencia, 1938. Pág. 13

Obras que no fueron citadas

Hiernaux-Nicolas. En: Geografía como metáfora de la libertad. (Primera edición). Plaza y Valdés, s.a de c.v. México
Referencias a otros autores pertenecen a las cátedras impartidas en la carrera de Licenciatura en Historia de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano: Hobbes- cátedra de teoría social, profesora Isabel Cassigolli. Michael Focault- cátedra de DD.HH, Genero y Multiculturalismo- profesores Claudio Gutiérrez - Paulina Berrios. Hans-Georg Gadamer- cátedra de Epistemología- profesor José Fernando García.



1 COMENTE:

CFCA dijo...

Miguel:

Me gustó mucho el ensayo. Tanto así, que sin haber leído a Reclus, ya me propuse sumar una de sus obras a mi biblioteca.
Ahora, una cosa sobre la forma:

""Es el hermano campesino, que es subyugado por los sacerdotes, los señores, los magistrados, todos con la complicidad de la policía y el ejército; el mismo al cual se le expropiará la tierra que trabaja, aquella tierra que ama y en la cual se sustenta su diario vivir para sus generaciones venideras.
Aquel hombre y la tierra no pueden ser expropiados, el campesino comparte sus frutos producidos con la gente que lo necesita, y no lo vende o cambia por nada como sí lo hacen los sujetos movidos por el poder y su acumulación.""

Seleccioné ese párrafo porque me hace mucho sentido con lo que -creo- te motivó a estudiar Historia; el mismo sentido que te emociona cuando hablas de Silvio Rodriguez... y el mismo estilo conmovedor del gran Michelet.

En definitiva, el recorrido que haces me fue muy nutritivo, puesto que me entregó la perspectiva de la disciplina geográfica; se puede observar el camino de ésta durante el paradigma positivista de fines del s.XIX y comienzos del XX; la instrumentalización que, /desde arriba/ (el Eº, los grandes Capitales), recibe el conocimiento, en fin. Un trabajo que sirve, para quien lo lea con atención, como una aproximación a la geografía de corte anarquista y, porqué no, a los debates que hoy están tan patentes como en las ideas de Reclus: la des-academización para acercar el conocimiento a las mayorías.

Salú cumpañero...

PS: No creo que hoy vea el partido con ustedes. Me necesitan en otro lado.