Pérez, que tiene dos tías y varios primos en el archipiélago canario, reconoce que su relación con España es 'especial', pero menos intensa de lo que su aspecto físico y su nombre indican.
'Nunca he vivido en España, sólo he viajado a allí algunas veces.
Me he criado aquí, soy danés y mi mentalidad es completamente danesa', explica a EFE el jugador tras el último entrenamiento de su selección antes del partido de mañana.
El jugador, de 33 años, domina varios idiomas, aparte del danés, su lengua materna, pero apenas chapurrea un poco de español.
Kenneth Pérez posee una trayectoria brillante en el fútbol holandés -ha jugado en el AZ Alkmaar, el Ajax y el PSV-, que no se corresponde con su papel secundario en la selección danesa, de la que se retiró voluntariamente hace un año, frustrado por sus continuas suplencias y sus actuaciones mediocres.
Tras un sobresaliente inicio de temporada en su nuevo equipo, adonde llegó procedente del Ajax, ha acordado con el seleccionador Morten Olsen su regreso al equipo nacional, y todo apunta a que lo hará como titular, aunque ninguno de los dos lo confirma.
Pérez prevé un partido en el que ambos equipos saldrán nerviosos por la presión -más Dinamarca, porque sólo le vale el empate-, pero que se puede ir abriendo con el paso de los minutos.
Que España pueda salir más retrasada de lo habitual para jugar al contraataque no preocupa al danés, internacional en 19 ocasiones, quien cree que, al contrario, puede favorecer al conjunto local.
Tampoco le da importancia al ambiente tenso que rodea a la selección española y a su técnico, Luis Aragonés.
'A veces parece una casa de locos, pero es una cosa muy sureuropea. Aquí en Dinamarca lo tomamos todo con mucha más calma', afirmó Pérez, quien asume como improbable que se cumpla su gran sueño: jugar en la liga española.
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