MATEU FERRER. PALMA.
Un ex alto cargo del PP en el consorcio del Palma Arena -el organismo público que contrató las obras del velódromo y gestionó directamente su ejecución-, Antoni Palerm, vendió material de construcción por valor de 11.400 euros a la adjudicataria del proyecto, la unión temporal de empresas (UTE) FCC/Melchor Mascaró, según él mismo ha admitido a este diario.
En la pasada legislatura, Palerm fue el director del área de Deportes de s´Institut, en virtud de lo cual actuaba como representante del Consell de Mallorca en la junta rectora del consorcio que llevó a cabo la construcción de la magna instalación deportiva. El ex alto cargo del PP regenta la conocida empresa familiar Palerm, dedicada a la fabricación y comercialización de materiales de construcción, pavimentos y revestimientos, entre otros, con sede principal en Porreres pero con varias sucursales en otros municipios.
Palerm no tiene problema en reconocer que su empresa suministró material para las obras del Palma Arena. Tras consultar sus archivos, el que fuera director insular de Deportes informó que en 2007 su marca "facturó a la UTE FCC/Melchor Mascaró 11.423 euros con 86 céntimos", especificó. "Fue para una partida de bloques de cara vista, de los que se colocaron en la fachada principal del edificio", detalla.
Este material "es lo único que hemos servido a la UTE, pueden ir a buscar lo que haga falta, no encontrarán nada más", sentenció Palerm.
"No hicimos las gradas"
Por el contrario, Antoni Palerm niega tajantemente que su firma fuera la encargada de ejecutar las estructuras prefabricadas de hormigón para soportar las gradas del velódromo, ni de que éstas fueran transportadas con camiones de su empresa, como han asegurado algunas fuentes a este diario: "Eso es totalmente falso, somos fabricantes de materiales de construcción, no hacemos prefabricados, y para comprobarlo basta darse una vuelta por la empresa, verán que aquí sólo hacemos vigas, bloques o bovedillas".
El representante del Consell en el consorcio del velódromo dice ser perfectamente consciente "del puesto en el que estaba", por lo que "no habría hecho según qué", añade, en previsión de posteriores responsabilidades. También se muestra visiblemente indignado con "la persona o personas que quieren hacernos daño con falsedades", asevera.
Como es sabido, la Fiscalía Anticorrupción está investigando si detrás del serio descuadre en las cuentas del Palma Arena se produjo un enriquecimiento ilícito por parte de empresarios o cargos políticos del PP en la pasada legislatura. A día de hoy, los extras en la obra ya han más que duplicado su coste inicialmente previsto y sobrepasan los 110 millones de euros.
Hace unas semanas, los arquitectos García-Ruiz Guasp ya prestaron declaración ante el fiscal Pedro Horrach en calidad de imputados. Los técnicos cobraron unos 9 millones de euros por la dirección de la obra, una cantidad que el Ministerio Público considera desorbitada. Con todo, los García-Ruiz Guasp la justifican con subcontratas de otros profesionales.
Por su lado, Palerm asegura que no ha sido citado por la Fiscalía.
