Posted by Monique J. Lemaitre on May 14, 1997 at 19:55:24:
ELVIA CARRILLO PUERTO: LA "MONJA ROJA DEL MAYAB"
Por Monique J. Lemaître León
Northern Illinois University
Elvia Carrillo Puerto, una de los trece hijos de Adela Puerto Solís y Justiniano Carrillo Pasos, nació en la pequeña ciudad de Motul, situada cuarenta y cuatro km. al este de Mérida, Yucatán, el 6 de diciembre de 1878. Como Louise Michel (1830-1905), la dirigente revolucionaria de la insurrección de la Comuna de París, Elvia sería también recordada por la posteridad con el apelativo de "La Monja Roja".
Hacia 1878, el municipio de Motul ("Mo Tuul" en maya: "que no reboza, que no se derrama") era uno de los más importantes de la región, debido, sobre todo, a sus riquísimas haciendas henequeneras. En México, el gobierno de Porfirio Díaz llevaba un año de haber sido reconocido por los Estados Unidos, mientras las tropas norteamericanas continuaban cruzando la frontera bajo el pretexto de "perseguir apaches". Gobernaba Yucatán el licenciado don Manuel Romero Ancona. La exportación henequenera que había sido de 45,000 pacas en 1875, subiría a 113,000 pacas en 1880. En 1877 los bienes de consumo básico producidos en Yucatán eran de 18.1 pesos por habitante, "cifra excepcionalmente alta de acuerdo con la media nacional" Esta cifra irá disminuyendo hasta alcanzar 0.48 pesos por habitante en 1910, conforme aumenta la exportación de henequén. Inversamente, en la produción agrícola con fines de exportación se pasará de 9.28 pesos por habitante de Yucatán en 1877 a 58.38 pesos en 1910, cantidad que no equivale, ni mucho menos, al sueldo individual por habitante, sino que está destinada, en su inmensa mayoría, a incrementar las cuentas bancarias de hacendados e intermediarios. El cultivo del henequén va desplazando rapidamente al del maíz, y ya en 1881, y debido, además, a una fuerte sequía, habrá que importar maíz para alimentar a la población yucateca.
Elvia Carrillo Puerto nace cuando el cambio en la producción agrícola se está tambiéntraduciendo en un drástico y dramático incremento en la cantidad de peones acasillados en las haciendas henequeneras. Estos pasarán de unas cuantas centenas en 1860 a 20,000 en 1880, hasta alcanzar la horripilante cifra de 80,000 en 1910. Aproximadamente 1,200 haciendas henequeneras cubrían entonces alrededor de un millón de hectáreas cuya propiedad se concentraba en unas 800 familias. Varias familias extendidas por su parte, llegaron a controlar hasta treinta haciendas. El cultivo, basado en una estructura de explotación feudal, se va haciendo cada vez más extensivo y el precio del producto es dictado por las necesidades del mercado norteamericano, en donde los mismos industriales que utilizan los cordeles de henequén o sisal para su maquinaria agrícola, han desarrollado la tecnología necesaria para la elaboración de los mismos. Los norteamericanos al fijar el precio de la fibra, descargan sobre los hacendados henequeneros sus propios gastos de procesamiento, y los hacendados, a su vez, descargan en sus peones las bajas en el precio del henequén, exigiéndoles horas de trabajo cada vez más largas y vendiéndoles en "tiendas de raya" los productos básicos necesarios para su supervivencia a precios cada vez más elevados, lo cual aumenta su deuda hereditaria para con el patrón, perpetuando así, de facto, un sistema de esclavitud.
La desigualdad entre hacendados y peones se manifestaba publicamente mediante el ostentoso estilo de vida de los primeros-lujosas mansiones neoclasicas en la calle 59 de Mérida, con muebles Chippendale e Imperio, pianos alemanes y vajillas de Bavaria; carruajes Rétif, frecuentes viajes a La Habana y Europa, educación europea para sus vástagos-que contrastaba con la existencia miserable de sus peones acasillados. Fueron estas injusticias sociales las que causaron una profunda impresión en los hermanos Carrillo Puerto desde su infancia, notablemente en Felipe y Elvia.
Los hermanos Carrillo Puerto crecieron en una familia de clase media baja turnándose para ayudar a los padres en la miscelánea de su propiedad. Todos asistieron a una escuela secular rodeados de alumnos cuya lengua materna era el maya. Fue ahí donde donde Elvia Carrillo Puertologró adquirir el alto nivel de bilingüismo que tan valioso le resultaría más adelante. Elvia y Felipe , cuatro años mayor que ella, parecen haber sido inseparables desde niños. Uno de los primeros empleos de Felipe apenas adolescente fue el de carretero. Este trabajo le obligó a recorrer todas las haciendas henequeneras de la región y Elvia debe haberse enterado por boca de Felipe de los abusos inhumanos de que eran víctimas los peones acasillados a manos de los capataces de las plantaciones de henequén.
Elvia y Felipe Carrillo Puerto también parecen haber sido influenciados desde temprana edad por dos individuos que residían entonces en Motul, un sacerdote y una maestra de primaria. El sacerdote era un sacerdote catalán anarquista, Serafín García, quien poseía una abundante biblioteca en la cual destacaban obras de Jean-Jacques Rousseau, los enciclopedistas y varios utopistas franceses como Saint Simon y Proudhon.
En cuanto a la maestra de escuela de Elvia Carrillo Puerto, ésta parece haber sido una seguidora de Rita Cetina Gutiérrez (1846-1908) quien iniciara la organización feminista "La Siempreviva". Rita Cetina había fundado también la primera escuela secundaria para mujeres en Mérida, así como la primera escuela normal para maestras. Publicó en vida la revista La siempreviva, que incluía artículos escritos por Mary Wollstonecraft, Flora Tristán, Florence Wright, John Stuart Mill y su compañera Susan Anthony, Grimké y Victoria Woodhull, escritoras y escritores que discutían abiertamente los problemas que aquejaban a las mujeres de la época y entre los cuales destacaban el control de la natalidad, el derecho al aborto, la prevención contra las enfermedades venereas y la prostitución. La siempreviva , así como Woodhull and Chaflin Weekly publicaban artículos sobre temas controversiales como la sexualidad femenina, el amor libre, el divorcio y el doble estandard de moralidad. Veinte años después, la plataforma feminista de Elvia Carrillo Puerto plantearía la discusión de esos mismos temas.
En 1891, cuando apenas contaba con 13 años de edad, Elvia Carrillo Puerto contrajo nupciascon un hombre bastante mayor que ella, Vicente Pérez Mendiburo con quien tuvo su único hijo, Marcial Pérez Carrillo. Elvia enviudó diez años más tarde. Este matrimonio debe haberle otorgado a Elvia una relativa libertad en una época en que la edad de la emancipación de las mujeres solteras no se alcanzaba hasta los 31 años, aún cuando a los hombres se les declaraba legalmente adultos a los 21. Sabemos que Elvia aprendió taquimecanografía durante esos años y también que se desenvolvió como maestra. En 1909, Elvia empieza a trabajar activamente para la causa antireeleccionista Morenista en Yucatán como mensajera y propagandista. Su trabajo la lleva a Acanceh, Tizimin, Temax y Valladolid. Entre los documentos que se le encomiendan uno dice: "Es urgente aliarse a los morenistas para evitar que el gobierno sucumba en manos de un gobierno déspota y tirano"; gobierno formado "por una sola familia de esclavistas" cuya única ambición es "apoderarse de todas las principales riquezas del país y reducir al sufrido pueblo a braceros de sus ricas propiedades". La idea es derrocar a Muñoz Arístegui, hombre de paja del ex-gobernador Molina Solís, ahora Ministro de Fomento de Porfirio Díaz. Sin embargo, la rebelión de Valladolid fracasa y Elvia se ve forzada a regresar a Motul en donde su hijo Marcial, de 18 años de edad, colabora en el periódico que Felipe Carrillo Puerto ha empezado a publicar. Ese mismo año Elvia se casa en segundas nupcias con Francisco Barroso.
Años más tarde, los presidentes Cárdenas y Ruiz Cortínez condecorarían a Elvia Carrillo Puerto como veterana de la Revolución Mexicana, con la medalla de la Legión de Honor Mexicana.
En 1912, Elvia Carrillo Puerto organiza la Liga Feminista Campesina Rita Cetina Gutiérrez, pero son años difíciles ya que su hermano Felipe se encuentra encarcelado en Mérida, habiéndosele acusado de asesinar a Nestor Arjonilla, un hombre a sueldo de la fracción Pinista, quien había sido por su parte encargado del asesinato de Felipe (Bolio, p. 50).
En 1915, Carranza, después de la rebelión militar de Abel Ortiz Argumedo, nombra al General Alvarado gobernador y comandante militar de Yucatán, en diez gubernaturas sucesivas. Elvia Carrillo le es presentada al General Alvarado por Rosa Torre quien había sido enfermeraen las fuerzas de Alvarado durante las batallas de Blanca Flor, Pocboc y Halachó. Elvia parece haberle causado una fuerte impresión al General Alvarado, pues poco después de la visita del General a Motul, no solamente Felipe Carrillo es liberado, sino que poco después es nombrado Presidente del Comité Ejecutivo Agrario de Motul, a pesar de su breve encarcelamiento, acusado de abrigar simpatías zapatistas.
Este nombramiento señala el comienzo de la carrera política de Felipe Carrillo Puerto como líder socialista. Poco después Alvarado anuncia la organización del Primer Congreso Feminista de México, que tendría lugar en Mérida, Yucatán. El único otro congreso feminista en América Latina hasta esa fecha había tenido lugar en Buenos Aires en 1915.
Durante el Primer Congreso Feminista de México, el texto más controversial fue escrito por la secretaria de Carranza, Hermila Galindo. Fue leído durante el congreso por don César A. González, un enviado del Ministerio de Educación Pública y sostenía que la educación de la mujer no debería limitarse a lo "bello" y a lo "espiritual" sino que debería alentar a las mujeres a darle libre expresión a su sexualidad y a desarrollar su razón. Como defensora del amor libre, Hermila Galindo hacía un llamado para la promulgación de nuevas leyes que protegieran a la mujer dentro y fuera del matrimonio y que aseguraran los derechos de los hijos ilegitimos , mientras criticaba el doble estandard de moralidad. Entre las maestras de escuela que habían organizado el congreso varias demandaron que su ponencia fuese incinerada.
La Voz de la Revolución publicó los "Anales" del Congreso criticando fuertemente a sus participantes por no haber llegado a ninguna conclusión sobre dos de los problemas más urgentes bajo discusión: La otorgación del voto femenino y la decisión de implementar la "educación racionalista" en las escuelas yucatecas. Se organizaría un segundo congreso en 1916 cuyos anales nunca fueron publicados.
En 1917, Carlos Castro Morales, presidente del Partido Socialista Obrero es elegido gobernador del estado y Felipe Carrillo Puerto, quien es también diputado de la primeralegislatura revolucionaria del estado, lo substituye en la presidencia del Partido Socialista. El partido socialista "se va apartando de los marcos organizativos en que el régimen de Alvarado lo había querido encuadrar. De un partido populista, se va transformando en un partido popular" escriben Enrique Ortega y Francisco Paoli Bolio en El socialismo olvidado de Yucatán Del 21 al 31 de marzo de 1918 tuvo lugar en Motul el Primer Congreso Obrero de Yucatán. Dentro del temario de dicho congreso destaca el Sexto Tema: "Aceptación de la mujer obrera en las Ligas deResistencia, cobrándoles la mitad de la cuota fijada a los hombres y votar por ella en los puestos consejiles después de transcurrir un año de pertenecer a su lugar" (Paoli y Montalvo, p. 193-194). El dictámen de la Comisión del Sexto tema, concluye entre otras cosas que:
El hombre ha sufrido la tiranía de las leyes y del capital y la mujer no sólo ha sufrido la tiranía de las leyes y del capital, sino también la oprobiosa tiranía de los esposos, de los padres y aún a veces de los hijos. Los gobiernos anteriores no han querido darle significación a los derechos de la mujer, como individualidad humana.
Poco después, Elvia Carrillo Puerto ayudaría a fundar las "Ligas de Resistencia Feministas" . Hasta 1919, Elvia Carrillo Puerto viajó a lo largo y ancho de Yucatán, organizando ligas de resistencia campesinas de mujeres, campañas de alfabetización y de higiene femenina así como de control rudimentario de la natalidad, escribiéndo sus propios discursos en maya y en castellano. Como propagandista de las ideas socialistas fue calificada por la prensa conservadora de "suffragette bolchevique" y de "Monja roja del Mayab". Durante sus investigaciones sobre el feminismo europeo y norteamericano, a menudo consultaba con los intelectuales socialistas que rodeaban a su hermano Felipe. Uno de ellos, el Licenciado Santiago Burgos Brito (A. Carrillo P., pp. 89-92), a quien le debemos el más hermoso retrato escrito de Elvia, nos dice:
Me visitaba con frecuencia en relación con sus campñas societarias, sobre todo cuando ocupó una curul en el Congreso del Estado. Iba siempre en busca de consejo, de revisión de sus escritos, y sobre todo, de libros, en esos días en que Elvia encabezaba en Yucatán la corriente feminista, que ya se iba abriendo paso por el mundo. Gustaba documentarse, de conocer a los grandes ideólogos del socialismo. Y por mí conoció a Gina Lombroso, a Leontina Zanta, y a otras muchas escritoras del feminismo europeo, empapándose en lo medular de la doctrina, en la clara expresión de sus anhelos redentores.
Durante la campaña del Coronel Isaías Zamarripa en 1919, quien obedecía ordenes de Carranza de destruir el socialismo yucateco, los locales de la sede del partido socialista fueron invadidas y muchos de sus miembros asesinados. Felipe Carrillo Puerto tuvo que huir en un buque carguero hacia Nueva Orleans y Elvia partió al Distrito Federal. Ahí, con la ayuda de su amiga y compañera socialista -feminista Elena Torre, fundó la "Liga Feminista Rita Cetina Gutiérrez" de la ciudad de México que reunía sobre todo a obreras , maestras y empleadas de gobierno.
En 1920, después del asesinato de Carranza en Tlaxcalantongo, Felipe Carrillo regresó a Yucatán. En el puerto de Progreso se le brindó una bienvenida apoteótica y, al año siguiente, fue electo diputado federal. A pesar de que el Partido Socialista del Suroeste había votado en contra de unirse a la Tercera Internacional durante el Congreso de Motul, probablemente siguiendo los consejos de Roberto Haberman y Plutarco Elías Calles, Felipe Carrillo Puerto fue uno de los miembros fundadores del Partido Comunista Mexicano.
El 1ero de febrero de 1922 se inaugura, en Yucatán, el breve gobierno socialista de Felipe Carrillo Puerto, con su famoso discurso en maya dirigido a los campesinos y obreros del estado. Durante el gobierno de Felipe, Elvia ocupa una oficina en el edificio de la Liga Central, como presidenta de la "Liga Feminista Rita Cetina Gutiérrez", desde donde también colabora como editorialista y reportera de la revista socialista Tierra. Organiza reuniones populares pedagógicas semanales y viaja a los puntos más inaccesibles del estado para redactar notas sobre las condiciones socio-económicas de esas regiones. Organiza la visita de Anne Kennedy, Secretaria Ejecutiva de la Liga Americana de Control de la Natalidad de Margaret Sanger con el propósito de organizar en Yucatán una serie de clínicas para el control de la natalidad. Durante los "jueves agrarios" los discursos de Elvia tienden a pugnar porque a las mujeres jefas de familia se les garanticen los mismos derechos que a los hombres en la distribución de tierras. Promovió la "educación racionalista" y la construcción de escuelas rurales en todo el estado , así como la organización de cooperativas de mujeres para la venta de hamacas, artesanía y productos agrícolas. Tampoco se olvidó de las mujeres urbanas y luchó por la eliminación de la prostitución y la fundación de guarderías infantiles para las obreras.
A pesar de que sus admiradores y admiradoras se centran en alhagos a su inteligencia, encanto natural y belleza física, además de recalcar sus dotes de oradora y su gran energía como organizadora, sus enemigos, concentrados sobre todo en la conservadora Revista de Yucatán, no cejaron en sus ataques a la "Liga Feminista Rita Cetina Gutiérrez". Ataques a los cuales Elvia respondía con afilada pluma. Una vez legalizado el divorcio en Yucatán en 1923, Elvia es una de las primeras en apelar a ella y obtener el divorcio de su segundo marido.
En 1923, y acompañada de dos otras feministas yucatecas, Gloria Mireya Rosado y Susana Betancourt, Elvia asiste al Congreso Panamericano de Mujeres en la ciudad de México. La pequeña delegación yucateca se destacó como la más radical del Congreso, y, aún cuando salieron derrotadas en sus demandas relacionadas con el control de la natalidad y el amor libre sí lograron obtener un consenso a favor del voto femenino. Este ultimo se convertiría desde ese momento en el punto central de las demandas de todos los grupos feministas de México y del resto de América Latina.
El 3 de enero de 1924 son asesinados en Yucatán Felipe Carrillo Puerto, gobernador constitucional del estado y tres de sus hermanos. Esto sucede durante el levantamiento de De La Huerta, mientras Plutarco Elías Calles estaba inmiscuido en la sucesión presidencial. Una conspiración de ricos hacendados henequeneros furiosos por la expropiación de las "tierras ociosas", aprovechándose de la inestabilidad en el país viene a cegar la vida de cuatro de los hermanos Carrillo Puerto, mientras que ni Obregón ni Calles levantan un dedo para ayudarlos.
La muerte de Felipe terminó con el sueño socialista yucateco. Elvia trató, por un tiempo, de permanecer en su puesto de Diputada estatal junto con las otras dos mujeres que habían sidodemocráticamente elegidas a puestos dentro de la legislatura socialista, pero muy pronto los antiguos amigos de Felipe se unen a la oligarquia y obligan a que Elvia salga exiliada hacia el Distrito Federal temiendo por su vida. La lucha de Elvia por la obtención del voto femenino continuaría por décadas. Volvemos a encontrarla en San Luis Potosí en donde es candidata a diputada Y casi asesinada por su rival más cercano quien había obtenido una votación marcadamente inferior a la de Elvia. La Cámara de Diputados y el gobernador de San Luis declaran nula la votación alegando la anticonstitucionalidad de votar por una mujer, aún a nivel estatal.
De 1925 hasta los años cincuenta Elvia Carrillo Puerto fundó un sinnúmero de ligas feministas, recopiló cientos de miles de firmas a favor de la legalización del voto femenino y tuvo entrevistas al respecto con todos los presidentes de la república hasta que en 1958 se le otorgó a la mujer el derecho de votar en elecciones presidenciales. Mientras tanto Elvia ocupó diversos cargos en instituciones gubernamentales, como trabajadora social, investigadora, oficinista. Fueron largos años de lucha y de pobreza que pasó en un humildísimo apartamento de la Ribera de San Cosme, en donde vivía con sus perros y su única nieta, Elvia Pérez. Fue su nieta quien, en 1968 y después de la muerte de su abuela a la edad de 90 años, acompañó su cuerpo al cementerio de Mérida en donde reposa cerca de las tumbas de sus hermanos y de Alma Reed, la periodista norteamericana de quien Felipe se enamorara poco después de la llegada de ésta a Yucatán en 1923.
Elvia Carrillo Puerto fue una gran revolucionaria, una gran socialista y una feminista que luchó durante toda su larga vida por los derechos de la mujer, sobre todo de la mujer indígena, de la campesina maya y de las obreras mexicanas. Merece, sin que quepa la menor duda, ser redescubierta y ocupar el papel que le corresponde en la historia del feminismo mexicano.