cronologíaglosariomapa interactivogalería de fotos

búsqueda directa


La entrada de los
españoles





La guerra de reconquista
por Manco Inca








La entrada de los españoles
La ejecución de Atahualpa en Cajamarca el 26 de julio de 1533 dejó formalmente sin gobernante al pueblo nativo y sumió al Tahuantinsuyo en los estertores de una caótica agonía. La desaparición del inca, señor absoluto del imperio y encarnación de todos los poderes -divinos, humanos y materiales- dio inicio al resquebrajamiento de la estructura política y administrativa del incario, lo




que trajo como consecuencia desobediencia, abandono de cargos, migración de mitmas y yanaconas e, incluso, sublevación de naciones tercamente rebeldes y de pueblos recientemente conquistados por los incas.

Todo ello obligó a Francisco Pizarro a intentar lograr una pronta solución a esta difícil situación. Así, buscó a un candidato que tuviera los méritos necesarios para ser proclamado inca y que conviniera a sus intereses, y apresuró su viaje al Cusco. Poco antes de dejar Cajamarca, los conquistadores designaron a Túpac Hualpa, otro hijo de Huayna Cápac, como inca, y en su compañía y en la de Calcuchímac, el cautivo general atahualpista y antiguo enemigo de Huáscar, se dirigieron a la capital imperial.

Tras un accidentado trayecto en el que fueron hostilizados por las huestes del guerrero Quisquis, aliado de Atahualpa, los españoles llegaron a Jauja, donde súbitamente murió Túpac Hualpa, al parecer envenenado por Calcuchímac, quien deseaba que el sucesor fuera Atitoc, hijo de Atahualpa. Cuando reemprendieron la marcha hacia el Cusco, tuvieron varios encuentros con los quiteños y estuvieron a punto de ser desbaratados en Vilcacunca. Luego de conseguir una difícil victoria, Pizarro hizo quemar vivo a Calcuchímac y, días más tarde, recibió la visita de otro hijo más de Huayna Cápac, llamado Manco Inca, quien le propuso una alianza para derrotar definitivamente a Quisquis y para evitar que el Cusco fuera incendiado por los quiteños. El español aceptó su ofrecimiento, lo proclamó inca y, en su compañía, después de vencer a Quisquis y de obligarlo a tomar el camino de regreso a Quito, ingresó a la capital del Tahuantinsuyo.

subir

Pag. 1 | 2 | 3


ver galería