El lago de los cisnes PDF Imprimir E-mail

El lago de los cisnes

Música de Tchaikovsky (ballet)

El Royal Ballet en la Royal Opera House de Covent Garden

Dirección de orquesta: Valeriy Ovsyanikov / Producción: Anthony Dowell

Coreografía: Marius Petipa / Lev Ivanov

Música: Piotr Ilich Tchaikovsky

Ballet en cuatro actos. Primera representación en 1895

Primera representación de esta producción: 1987

La representación dura aproximadamente 2 horas y 50 minutos, incluidos dos descansos

El reestreno de la romántica producción del Lago de los cisnes de Anthony Dowell para el Royal Ballet, es un suntuoso regalo para todos los públicos. Los diseños están inspirados en la Rusia Imperial de 1895, año en el que este ballet se representó por primera vez. Esta legendaria producción es, simplemente, la pieza de ballet más famosa con la música más apreciada. El Lago de los cisnes es una obra clásica de amor y traición. Es el cumpleaños de Sigfrido y su madre le regala una ballesta pero también le lanza un ultimátum para que encuentre esposa. Los cisnes del lago son, en realidad, mujeres que un malvado mago ha encantado. Durante el día viven como cisnes y por la noche recuperan su forma humana. Sigfrido se enamora de uno de los cisnes, que es en realidad la Princesa Odette. Únicamente alguien que la ame de verdad podrá romper el hechizo. La producción en Covent Garden es una versión fiel de la coreografía de Marius Petipa y Lev Ivanov. La prima ballerina argentina Marianela Nuñez, despliega una figura espectacular en el papel de Odette y forma una soberbia pareja con el prodigioso Thiago Soares, representando al Príncipe. Una asombrosa coreografía, las imágenes inolvidables de los cisnes etéreos bajo la luz de la luna, bailes de palacio, una actuación asombrosa y la música divina de Tchaikovsky. Todo ello bajo la batuta del experto Boris Gruzin para hacer de este evento una noche de inspiración y romance.

Reseñas en prensa:

Marzo de 1987, The Spectator, Londres:

“...Dowell ha montado la producción más auténtica desde la versión de Sergeyev en San Petersburgo.”

“¡Qué magnífica actuación! ¡Espléndido!” – The Telegraph

Grabado en directo en la Royal Opera House de Covent Garden – Octubre de 2008

Sinopsis por actos

Acto I

En los exteriores del palacio, los campesinos ultiman las preparaciones para la celebración de la mayoría de edad del Príncipe Sigfrido. Llega su tutor para asegurarse de que todo está en orden. Le acompañan Benno, el mejor amigo de Sigfrido, unos cadetes y algunas damas de la corte. Tras recibir unas flores de los campesinos, Sigfrido ofrece lazos a las damas y bebidas a los hombres. Entran tres bailarines y realizan un pas de trois como entretenimiento. Mientras pasea por los jardines, la madre de Sigfrido descubre la celebración extraoficial por medio de una de sus doncellas. A medida que se acerca, Sigfrido intenta ocultar la prueba de que ha estado bebiendo, pero ella conoce bien el amor de su hijo por la vida despreocupada. Su madre le dice que debe casarse y que debe elegir esposa entre las mujeres que asistirán al baile la noche siguiente. El tutor y Benno tratan de animar al pensativo Sigfrido y finalmente le convencen para continuar las celebraciones. El tutor, completamente ebrio, insiste en bailar con dos de las hijas de las damas de honor y, tras caerse al suelo, le convencen para que regrese al palacio con Sigfrido. En el cielo vespertino, Benno divisa una bandada de cisnes por lo que Sigfrido y los cadetes deciden finalizar las celebraciones con una sesión de caza. Toman unas ballestas y parten tras los cisnes.

Acto II

Benno y los cadetes se detienen en una capilla en ruinas que hay a un lado del lago. Aquí se esconde un espíritu maligno en forma de búho. Los cadetes parten en busca de Sigfrido, que llega en el momento en que una bandada de cisnes se posa sobre las ruinas. El Príncipe se esconde cuando ve cómo uno de los cisnes se transforma en una hermosa mujer, la Reina Cisne Odette. Asustada, ella le dice que un espíritu maligno las ha hechizado, convirtiéndolas en cisnes durante el día. Por la noche, en el lago creado por las lágrimas de la madre de Odette, recuperan su figura humana. El hechizo solo puede romperse si alguien que no ha amado jamás le promete amor eterno. Aparece el espíritu maligno y Odette interfiere para que Sigfrido no le dispare, ya que si muriese, el hechizo no podría romperse. Las doncellas cisne aparecen de las ruinas y rodean a Benno. Éste llama a sus compañeros para empezar a disparar, pero Sigfrido llega a tiempo para detenerlos. Odette les suplica que no dañen a las doncellas cisne. Los cadetes se retiran y Sigfrido y Odette se quedan solos con las doncellas. Odette y Sigfrido se declaran amor mutuo. Al amanecer, Sigfrido le pide que se quede con él, pero el poder del hechizo le obliga a ella y a las doncellas a regresar a las ruinas y convertirse de nuevo en cisnes.

Intervalo

Acto III

Los invitados llegan enmascarados para el baile de disfraces. Sigfrido y Benno se ponen sus máscaras y se mezclan con los invitados. La Princesa entra y ordena a Sigfrido que baile con seis jóvenes princesas que han venido al baile y que elija a una de ellas para que se convierta en su esposa. Él responde que no ama a ninguna y que no quiere elegir. Una fanfarria anuncia la llegada de Von Rothbart, el espíritu maligno transformado en humano, con su hija Odile, que guarda un parecido asombroso con Odette, y un séquito. Sigfrido no puede creer que Odette haya venido al baile y pregunta a Von Rothbart quién es la chica. Éste le responde que es su hija y antes de llegar a ella, comienza el entretenimiento de bailes nacionales. Sigfrido y Odile bailan. Odette se aparece como una visión y trata en vano de advertir a Sigfrido de que le están engañando. Cautivado por la belleza de la invitada e ignorante de todo mal, Sigfrido elige a Odile para que sea su esposa. Von Rothbart toma la mano de su hija y se la entrega a Sigfrido en un gesto triunfal. En público, Sigfrido se compromete a desposarla y a amarla eternamente. Entonces Von Rothbart revela la visión de Odette y Sigfrido se da cuenta de su error. Desolado, vuelve al lago.

Intervalo

Acto IV

En el lago, los cisnes aguardan el regreso de Odette. Ésta aparece entristecida y les cuenta la traición de Sigfrido. Las doncellas tratan de consolarla pero ella está resignada a morir. Para liberarse del poder maligno, deberá morir en el lago. La búsqueda desesperada de Sigfrido termina en el lago. Odette le perdona y ambos reafirman su amor mutuo. Von Rothbart declara que Sigfrido tiene que cumplir con su promesa de casarse con Odile. Si lo hace, Odette se convertirá en un cisne para siempre al amanecer. Sigfrido decide morir con ella y destruir así a Von Rothbart. Los amantes se apresuran al acantilado y se lanzan al lago para permanecer unidos en la muerte.