RODRÍGUEZ DE SILVA y VELÁZQUEZ, Diego (Sevilla, 1599 - Madrid, 1660)
Óleo sobre lienzo
207 x 148 cm.
1620 Procedencia
Iglesia de san Hermenegildo. Sevilla Comentarios
Inició su aprendizaje con Herrera "el Viejo" para pasar rápidamente al taller de Pacheco, con cuya hija Juana se casó en 1617. Durante su estancia en Sevilla encontró la manera de expresar su preocupación por el claroscuro y el natural en las escenas de género o bodegones con figuras, temas que ya tenían precedentes en la pintura flamenca e italiana. Con su excepcional dominio del dibujo y una gama cromática oscura, que acentúa los efectos del tenebrismo, alcanzó extraordinarias impresiones de verismo en estas escenas extraídas de la realidad cotidiana. Durante esta etapa sevillana ensayó también otros dos géneros en los que impera asimismo un fuerte tono de verosimilitud, el religioso y el retrato. De sus excelentes dotes como retratista ha quedado como testimonio en el Museo el que realizó de Don Cristóbal Suárez de Ribera, clérigo sevillano fundador de una cofradía dedicada a San Hermenegildo, cuyo emblema aparece situado a la izquierda.