Self Portrait with Monkey

1940

This self-portrait was painted during Frida's one year divorce from her husband Diego. After returning from Paris in the summer of 1939, her relationship with Diego became more distant. She left the house in San Angel and returned to live with her parents in the "Blue House" in Coyoacán. In October they mutually agreed to divorce and started divorce proceedings. The divorce was final in December. During the period following the divorce, Frida relied heavily on her pets for companionship. They were her husband and the children she knew by now that she could never have. In this painting, she appears with her pet monkey who clings to her like a surrogate child. The monkey is embracing her, his paw wrapped around her neck. Frida and her monkey are tethered by a deep red ribbon that wraps four times around her neck and then disappears behind the monkey's neck. However, this painting does not project a motherly, or even friendly feeling. The cold expression on Frida's face is one of resentment and anger over the divorce from Diego. The monkey's expression is the same.

This painting was auctioned at Sotheby's in 1979 and sold for $44,000. In the late 1980s it was privately sold to the pop star "Madonna" for $1,000,000.

Oil on masonite
21 ¾" x 17"
Private Collection of
"Madonna"

óleo sobre masonite
55,2 x 43,5 cm.
Colección privada de
"Madonna"

Este autorretrato fue pintado durante el largo año en el que Frida estuvo divorciada de Diego. Después de volver de París en el verano de 1939, su relación con Diego se volvió más distante. Frida abandonó la casa en San Angel y volvió a vivir con sus padres en la Casa Azul de Coyoacán. En Octubre, de mutuo acuerdo solicitaron el divorcio e iniciaron los trámites. El divorcio fue finalizado en Diciembre. Durante el periodo que siguió al divorcio, Frida se apoyó mucho en sus mascotas como consuelo y compañía. Ellos eran su esposo y los niños que ella ya sabía que nunca podría tener. En esta pintura, aparece con su mascota, un monito que se abraza a ella, como si fuera su bebé adoptado. El monito tiene la pata alrededor de su cuello, y ambos están rodeados de un lazo de color rojo sangre, que se enrolla cuatro veces alrededor de su cuello y desaparece detrás del cuello del mono. No obstante, este cuadro no proyecta un sentimiento maternal, ni siquiera amistoso. La fría expresión en la cara de Frida muestra resentimiento e ira por el divorcio de Diego. El mono tiene la misma expresión.

Este cuadro se subasto en Sotheby's en 1979 y se vendió por $44.000. A finales de los 1980, se vendió en privado a la estrella del pop "Madonna" por $1.000.000.