SAN SEBASTIÁN DEL OESTE, JALISCO (07/ABR/2015).- Quince policías muertos y tres heridos dejó la más reciente embestida de la delincuencia contra autoridades del Gobierno del Estado ayer por la tarde, confirmaron fuentes de la Fuerza Única Jalisco.

La agresión ocurrió cuando los policías recorrían la carretera Mascota-Las Palmas. Fueron emboscados por un grupo de sicarios que bloqueó la vía de enlace con varios vehículos.

De acuerdo con la Fiscalía General del Estado (FGE), el hecho es una “nueva reacción” del cártel Nueva Generación, después de haber atentado contra el comisionado de Seguridad Pública en la Entidad, Alejandro Solorio Aréchiga.

El pasado 30 de marzo, el mando policíaco circulaba por la Colonia Río Blanco cuando fue agredido a tiros. El blindaje del vehículo en que viajaba resistió un ataque con balas del calibre 50; incluso le iban a detonar un lanzacohetes.

La dependencia estatal confirmó, a través de un comunicado, que una de las líneas de investigación que suceden a la nueva agresión sí está relacionada con este hecho. Después del ataque en Río Blanco, la autoridad estatal retuvo y tiene bajo investigación a 15 “presuntos implicados en dicho atentado”.

La información oficial detalla que cuatro de éstos señalados ya fueron entregados a la Procuraduría General de la República (PGR), para que sea esa instancia la que los procese.

“Desafortunadamente varios de nuestros elementos fueron alcanzados por las balas”, expuso la Fiscalía en un comunicado.

El evento ocurrió a las 14:50 horas sobre la vía referida, pero a la altura del poblado de Soyatán, municipio de San Sebastián del Oeste. “En este punto, un comando armado de la delincuencia organizada abrió fuego contra un convoy de la Fuerza Única de Jalisco que iba en tránsito hacia la Zona Metropolitana de Guadalajara”.

Como contexto, se explicó que la agresión al mando policíaco ocurrió, a su vez, por la muerte de Heriberto Acevedo Cárdenas, conocido también como “El Gringo”, jefe de célula del cártel Nueva Generación, y quien presumiblemente comandaba las actividades delictivas en cuatro municipios de Jalisco.

La FGE tiene como principal línea de investigación que los hechos “constituyen una medida reactiva tras los hallazgos de la investigación y detenciones que se realizan en torno al atentado (...) que, a su vez, fue consecuencia del operativo que las fuerzas estatales realizaron el 23 de marzo en el municipio de Zacoalco de Torres”.