Todavía no lo puedo creer”, dice Diego Chaves al entrar al vestuario. Clima familiar, los tíos Ismael, Ariel y Carlos (sus segundos), algunos familiares, algunos amigos de su pasado futbolero. Intimo, con poquita gente como la que hubo en el estadio de la Sociedad Alemana de Gimnasia de Villa Ballester. En sólo dos rounds, La Joya (66,050 kg y 21-0, 17 KO) había despachado al francés Ismael El Massoudi (65,900 kg y 36-4, 14 KO y 3 PKO), arrebatándole el cetro welter AMB interino con autoridad y aún no caía de lo hecho. “Me asustó cómo voló la segunda vez que cayó”, afirma el papá de Tiziana (de cinco años) y Kiara, una beba de ocho meses.

-¿Pensabas que iba a ser así? -No me imaginé sacarlo tan rápido. Yo había prometido salir a pegarle, pero no esperaba que se cayera así, en la primera derecha sólida que le metí; me pareció muy flojito.

-¿Cómo te sentiste en el ring? -La pelea salió más fácil de lo que esperaba. Yo venía de una inactividad larga, porque me rompí el hombro derecho jugando al fútbol, y se me terminó el contrato con mi anterior manager (Mario Margossian). Allí apareció Osvaldo Rivero, me dijo que estaba la chance y le dije que sí, sin dudar. Estaba 100 puntos después de haberme roto el alma cuatro meses buscando tener aire y fuerza para 12 rounds. No lo tuve que usar todo, je. Si bien no lo encontré en el primer round por esa inactividad, en el rincón me serenaron y en cuanto lo encontré, lo saqué de una.

-¿Cumpliste un sueño? -Es el sueño de la familia, más que el mío. Al boxeo lo siento poco, pero me sale por estar en una familia en la que se respira boxeo, se come boxeo y se habla de boxeo. Tenemos un gimnasio en nuestra casa del barrio Santa Brígida, así que imaginate... A mí dame una pelota de fútbol, que es mi pasión. Lo hago porque se me hace fácil boxear, me sale naturalmente. Sé que soy el orgullo de mi familia porque éste es el triunfo de todos. De mi abuelo, Rudecindo, que se quedó en casa mirándolo en la tele y nos enseñó a todos; de mis tíos que me guían, y de mis sobrinos Brian, Sebastián y Kevin, boxeadores amateurs.

-Es raro que un campeón del mundo diga eso....

-Pero es así. Yo llegué hasta la Cuarta de Vélez; tuve de compañeros a Maurito Zárate, Damián Escudero, el Burrito Martínez, Franco Razzotti. Yo era lateral por izquierda y andaba lindo. Pero me di cuenta que en el boxeo tenía más chances de llegar. Pensá que con esta pelea me compro la casa. Igual, le sigo dando a la pelota, aunque no tan bien como quisiera. Hace unos meses me rompí el hombro derecho jugando un partido, ja. Pero si me llama el Tigre Gareca, estoy para jugar de 3.