Situación: En el sur de Guadalajara.
Distancia: A 115 km (1 h 20 min) de Madrid capital.
Cómo llegar: Por la A-2 hasta la salida 55 y seguir por la N-320 dirección Sacedón.

La aldea de Córcoles, en Guadalajara, está bien vigilada desde la altura por el monasterio de Monsalud. Esta obra cisterciense, declarada Bien de Interés Cultural en 1931, es la más antigua y mejor conservada de la provincia. Se ha abierto al público hace tres meses, aunque su última restauración data de 2009. Llegar hasta su ubicación no resulta difícil, dado que Córcoles está bien señalado en la carretera. Como hay que salirse un poco de la localidad para acceder al monasterio y pueden surgir dudas al visitante, siempre está la opción de preguntarle a algún vecino, que te indicará que se alcanza “sobrepasando el cementerio”.

Nada más llegar se aprecia la magnificencia del lugar, que luego se ve reflejada en su interior. Su mayor atractivo es la iglesia, la construcción más importante de todo el monasterio y donde se puede apreciar el estilo románico. Significativa por su buen estado de conservación es también la sala capitular, de planta rectangular. A lo largo del recorrido por las entrañas de Monsalud el guía muestra al visitante detalles curiosos, como marcas lapidarias de canteros grabadas en las piedras o un lavamanos de sorprendente origen islámico. Y curiosa también es la bodega, excavada en la roca y conectada con el pueblo mediante túneles. Es recomendable concertar cita previa (tel. 638 726 852). Hasta verano, el monasterio abre de J a D de 10 a 14 y de 15 a 18 h.

El corazón del monasterio

Una de las zonas más llamativas del monasterio de Monsalud es su claustro. Como en cualquier construcción de este tipo, es el espacio en torno al cual se organizan el resto de las dependencias. Éste data de la segunda mitad del s. XVI y conserva aún tres de sus cuatro galerías, cubiertas con bóvedas de ojivas que son un espectáculo a la vista. Adornan el centro unos jardines con árboles acordes al entorno donde está el monasterio.