El veterano Julio Álvarez dio la puntilla con dos acciones de calidad a una Ponferradina que tras la derrota (1-2) ante el Numancia se descuelga de la cabeza de la tabla y sigue sin ganar en el nuevo año como local.

Cuando todo parecía conducir a un triunfo que le volviera a colocar en la pelea por los 'playoffs', un perfecto lanzamiento de esquina de todo un especialista, que remachó Sergi Enrich y una jugada en la que le dio en bandeja el remate a Vicente, permitió al equipo soriano dar la vuelta al marcador y desquitarse de la derrota en la primera vuelta ante los bercianos.

El cambio táctico obligado por las ausencias de los laterales sancionados mostró a un Numancia con más presencia por banda en ataque con Cicinho y Vicente, a lo que respondieron los locales también con una variación al retrasar Andy su posición al central, dejando la dirección del juego al debutante, desde un inicio, Jon Gaztañaga.

Sin embargo, la falta de precisión en los pases de ambos equipos impidió llegadas con verdadero peligro sobre ambas porterías, salvo una acción en la que Berrocal, rompiendo el fuera de juego, se quedó en buena posición pero falló en la definición con un intento de vaselina excesivamente corto.

Ante la falta de ideas blanquiazules, el Numancia, sin demasiadas florituras, poco a poco empezó a crear peligro sobre el portal de Kepa Arrizabalaga, primero con un disparo de Antonio Tomás desviado en el minuto 25 y tres minutos después con su ocasión más clara, tras conducir Julio Álvarez hasta el borde del área, recogiendo el balón Sergi Enrich y, tras un recorte, enviando al larguero.

José Manuel Díaz da un giro radical con un cambio
El partido empezó a tener un solo dueño, el equipo de Juan Antonio Anquela, lo que llevó a José Manuel Díaz a dar un giro radical a su estrategia inicial y recuperar su sistema más habitual, con Aguilar en el lugar de Gaztañaga, que cedió la dirección a Andy.

Sin que diera tiempo a comprobar la idoneidad de la medida, una contra llevada por Acorán puso un centro medido al área donde se elevó Yuri para cabecear a la misma escuadra y conseguir un inesperado 1-0.

Anquela también varió su idea original con la entrada en la reanudación de un jugador más ofensivo como Del Pino por un renqueante Antonio Tomás, aunque la primera llegada peligrosa fuera local con un eslalon de Pablo Infante que le puso el balón a Infante que se escoró demasiado sin poder llegar a rematar.

Los sorianos volvieron a retomar el mando y a crear peligro en sus llegadas, primero con un doble túnel de Cicinho que salvó 'in extremis' su lanzamiento Alán Baró y, poco después (minuto 59), un centro al segundo palo que no acabó de rematar con fuerza Del Pino cuando tenía todo a su favor.

Díaz, ante el temor de un partido tan abierto buscó más presencia en la medular con el debut de Gonzalo Melero en el lugar de un Pablo Infante que volvía después de varias jornadas, optando entre medias su rival por una apuesta decidida por el ataque con la entrada de Braian Rodríguez y Edipo.

Los cambios revolucionaron el partido, pero más para una Ponferradina, más entonada gracias a la presencia, también en ataque, de Melero, pudiendo sentenciar con una triangulación en la que Acorán, en el pase definitivo, no fue capaz de encontrar rematador y si al defensa rival.

Todo parecía de cara para los locales que acabaron pagando caros los despistes al final para, primero, conceder la ocasión de una acción de balón parado -saque de esquina- a Julio Álvarez y después el propio capitán ajustició a la Ponferradina con una gran acción individual para servir el tanto de la victoria a Vicente.