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No fue hasta hace mucho que espiar era una tarea muy laboriosa que requería recursos excesivos y objetivos específicos. Actualmente, se ha vuelto mucho más fácil para los gobiernos o adversarios espiar a individuos... o a todo el mundo, ya que estamos. Vivir en el siglo XXI significa que desde el momento en el que uses Internet para guardar, editar o compartir algo, te conviertes en vulnerable a la vigilancia.
Con la mayor parte del tráfico de Internet visible para cualquiera que tenga acceso a los ordenadores por los que pasa tu mensaje (desde el ordenador de tu casa a tu operadora hasta el propio destinatario del mensaje y todos los puntos intermedios) ¿cómo puede alguien mitigar la vigilancia y mantener sus comunicaciones privadas?
La respuesta es usando un cifrado
. Cifrar mensajes es convertirlos en ilegibles salvo para la persona a la que tienen que llegarle esos mensajes. Estamos viendo cada vez más y más páginas web que usan cifrado para proteger la información que se transmite, pero desafortunadamente no es la opción predeterminada para muchos servicios en Internet. Para incrementar tu propio uso del cifrado y ayudarte a proteger tu información, instala HTTPS Everywhere, un complemento para navegadores que les dice a las páginas web que usen cifrado, y así obligar a los espías a volver a esos días del pasado.