Sevilla no deja que maten El Correo de Andalucía. Secundó masivamente la concentración convocada por el Comité de Huelga del periódico y nuestro sindicato CCOO para la retirada del DESPIDO COLECTIVO que pretende reducir uno de los más antiguos periódicos de Europa a una "actividad residual" de liquidación con un solo trabajador.
La plaza Nueva se llenó el viernes con un millar largo de personas con la concentración convocada por los trabajadores de El Correo de Andalucía en apoyo de su huelga, la primera de las cinco jornadas de paro en protesta por el DESPIDO COLECTIVO con el que el empresario Antonio Morera Vallejo pretende deshacerse de 28 de sus 29 trabajadores y quedarse solo con la cabecera y el archivo, con vistas a su venta o tal vez dispersión o desguace.
Mostraron la solidaridad de todos los estamentos, entidades, agrupaciones, partidos... Concejales de todos los grupos municipales bajaron del Ayuntamiento a protestar contra el cierre de esta Giralda de papel que es el Correo de Andalucía, segundo periódico más antiguo de Andalucía, junto a diputados nacionales, provinciales, autonómicos...
Toda Andalucía, sus ocho millones de personas, cuyos representantes en todos los ámbitos nos han mostrado todos, sin excepción, su solidaridad, no pueden estar equivocados. Le envían a don Antonio, como exige a sus empleados que lo traten, un mensaje claro: Rectifique, retire el DESPIDO COLECTIVO y ponga por encima de su lucro multimillonario de su grupo el patrimonio de la ciudad, 120 años de su historia que amenaza con convertir en pasta de celulosa. Los trabajadores de El Correo de Andalucía sabrán devolverle la dignidad al decano de la prensa si lo hace y ayudarle a ganar respeto, no a imponer miedo y ruina.
La huelga que acompaña a esta concentración ha supuesto un éxito rotundo, con la producción paralizada y la totalidad de los trabajadores secundando el paro. Es la primera de cinco días. Queremos desconvocar las demás, solo necesitamos un gesto del empresario. Lo que hasta ahora tenemos encima de la mesa, por escrito, es un fraude social y estudiamos que incluso pueda serlo legal, pese a las leyes sigan facilitando que el rico y poderoso se imponga al débil.
Este jueves, víspera del inicio de la huelga y la concentración, nos recibió el Parlamento de Andalucía, representado por sus cinco grupos parlamentarios, que interrumpieron el pleno para escuchar a los representantes de los trabajadores y a su sindicato CCOO.
Nos ofrecieron todo el apoyo y la asistencia a nuestra huelga por parte de delegaciones de los cinco partidos (IU, PSOE, PP, Cs y Podemos), una declaración institucional del Parlamento que apoyarán todos ellos contra el cierre del periódico, el recuerdo del papel que El Correo de Andalucía tuvo en el retorno de la democracia y en la consecución de la autonomía andaluza, e incluso una caja de resistencia. Muchas gracias.
Por supuesto, han aplaudido todos ellos: Antonio Maíllo (IU), Verónica Pérez (PSOE), Teresa Rodríguez (Podemos), Jaime Raynoud (PP), Guillermo Longoria (PP), José Muñoz (Cs), Sergio Romero (PSOE). Todos han hecho suya la causa de los trabajadores de El Correo de Andalucía.
Las muestras de apoyo son tantas y tan continuas que no nos da tiempo a agradecerlas todas ni a contároslas. Todas, eso sí, nos dan la vida que el DESPIDO COLECTIVO y el CIERRE de El Correo de Andalucía nos intentan quitar.
 |
| La delegación de trabajadores de CCOO con los grupos parlamentarios |
El editor del decano de la prensa de Sevilla presentó el día 12 un despido colectivo que afecta a 28 de los 29 trabajadores del periódico.
 |
| Visita de IU Sevilla a los trabajadores de El Correo de Andalucía |
El despido colectivo afecta a 28 miembros de la plantilla, quedándose la empresa con solo un empleado para la "actividad residual" de la página web.
Esta medida, que la plantilla en su totalidad rechaza rotundamente, supondrá la desaparición de la edición en papel de El Correo de Andalucía y de la digital tal y como la conocemos en la actualidad, referencia esta última de la comunicación local en Andalucía.
El grupo editor de El Correo de Andalucía, decano de la prensa de Sevilla, procedió el día 5 de septiembre a despedir a siete de los nueve trabajadores de la TV y a comunicar a los delegados de CCOO en el periódico el inicio de un DESPIDO COLECTIVO (ERE) que comenzará a negociarse el día 18 y en el que se verán afectados 28 de 29 periodistas de las ediciones de papel y web.
Los trabajadores de El Correo de Andalucía rechazamos tanto el apagón de la TV producido el 31 de julio, que supuso su cierre de facto, como los despidos de los compañeros de esa emisora y el despido colectivo que se plantea para el periódico. También su reconversión en un archivo de vídeos para su venta. Hay alternativas para que las emisiones de TV continúen y hubo ofrecimientos en este sentido para asociarse con el grupo editor y su presidente. No nos consta que se hayan explorado. Reclamamos que estas emisiones se retomen para revertir los despidos y el apagón. Eso está por delante de un mero recorte de las expectativas de lucro empresarial tras no obtener la licencia.
 |
| Concentración ante las puertas de El Correo de Andalucía |
Rechazamos que la solución para el periódico pase, sin más explicaciones, por un ERE salvaje. Creemos que no solo los trabajadores directamente afectados, sino toda la sociedad de Sevilla y Andalucía tiene el derecho de esperar un futuro para el decano de su prensa.
Discurso de los trabajadores de El Correo de Andalucía, leído en la plaza Nueva el 14 de septiembre de 2018:
Compañeros y compañeras, amigos y amigas.
Nos estáis dando tal lección de solidaridad que nosotros, profesionales de la palabra, no sabemos ya cómo agradecéroslo. Pero, antes de nada, gracias, de corazón, por vuestra asistencia.
Parece esto un mal sueño, ¿verdad? Hace seis años, muchos de vosotros estuvisteis aquí, clamando por una solución para El Correo de Andalucía que, por aquel entonces, se moría.
Hoy volvemos a vernos, en esta Plaza Nueva de Sevilla, para protestar contra el ERE salvaje al que se enfrenta, por sexta vez, la plantilla de este periódico.
Antonio Morera Vallejo, que en noviembre de 2013 se erigió en el salvador del decano de la prensa sevillana, integrando esta cabecera centenaria en su grupo de empresas, con 300 millones de volumen de negocio y 20 de beneficio anuales, se ha quitado la careta para convertirse en su verdugo.
Ha planteado el despido de 28 de los 29 trabajadores que, actualmente, componen la ya de por sí mermada plantilla.
Su propósito, tras cinco años de portadas imposibles, locuras editoriales, autobombo empresarial y personal e incluso mazazos laborales, es quedarse con una web de actividad residual. Pero, desde aquí, queremos preguntarle... ¿qué hay de residual en dar voz a los problemas de Sevilla, sus barrios y sus pueblos? ¿En narrar las victorias y derrotas deportivas que tanta euforia y angustia provocan entre los sevillanos? ¿En verbalizar la devoción o el interés político de una ciudad como esta?
¿Qué será de su archivo y su hemeroteca, una verdadera Giralda de papel, ambos patrimonio cultural e histórico que corre serio peligro de disgregarse o deteriorarse?
No queremos ni podemos consentir que 119 años de historia del periodismo sevillano acaben de la noche a la mañana sin que se exploren verdaderas vías de salvación.
Por eso, y pese a todo, esta plantilla que tanto ha sufrido y está sufriendo os pide de nuevo vuestro apoyo. De la sociedad, necesitamos su aliento y empuje. De las instituciones, su mediación. Y del empresario, un replanteamiento de la dramática situación en la que deja a casi 40 familias, pues no podemos olvidar el desmantelamiento que nuestros hermanos de El Correo Televisión sufrieron hace tan sólo una semana.
Pero que nadie piense que hemos bajado los brazos. Quienes formamos parte de El Correo de Andalucía tenemos aún fuerzas y, sobre todo, un gran sentido de la responsabilidad para con las historias que esperamos poder seguir contando en sus páginas. Y pelearemos como mejor sabemos hacerlo para que así sea.
Porque el Correo de Andalucía son sus barrios y sus pueblos. Sus pueblos y sus barrios. Porque, en esencia, el orden de los factores no altera el producto. Desde Pruna hasta Alanís. Desde Herrera hasta Lebrija. En Pino Montano y Valdezorras. En Triana y la Macarena. El Correo ha sido testigo de todo cuanto ha sucedido en Sevilla y sus entrañas. Y quiere seguir siendo el altavoz de aquellos que siempre se sintieron mudos ante la sociedad.
El Correo quiere cumplir 120 años de vida pintando de color la rutina de aquellos que construyen Sevilla y su provincia. De sus gentes. De sus ciudadanos anónimos que hacen grande a una ciudad y una provincia de las que nos sentimos orgullosos. Y no sólo en Feria, Navidad, El Rocío, Carnavales y Semana Santa. También en verano y en otoño. Cuando las luces se apagan para inaugurar una época de nostalgia y recuerdo. Porque El Correo quiere seguir contando cosas. No ser un motivo de nostalgia. Larga vida a El Correo.
La vapuleada plantilla de El Correo de Andalucía ha padecido hasta seis ERE legales o encubiertos a sus espaldas desde 2000, cuando la integraban más de 120 profesionales, además de un intento de venta fraudulento en 2013 y bajadas de sueldo acumuladas de hasta el 50% respecto al magro sueldo de entonces. En ese 2013 el empresario Antonio Morera adquirió el periódico, con el compromiso de cumplir las obligaciones empresariales, y rebautizó con su nombre a una TV local adquirida meses antes. En 2016 planteó el despido de siete periodistas. Ninguno de estos recortes ha salvado El Correo de Andalucía. Lo hacemos los trabajadores todas las tardes y los lectores a la mañana siguiente, o de forma más inmediata en la edición digital.
