El 1ero de octubre, se llevó a cabo una celebración para la conmemoración de las víctimas del conflicto de los años 95 y 96 en la zona Norte de Chiapas. Tuvo lugar en la comunidad de Masojá Shucjá, municipio de Tila, misma donde se reportaron 8 muertes a manos de integrantes de la organización “Paz y Justicia” en aquellos años.
Al evento no sólo asistieron gente de la comunidad y de otras cercanas, sino también llegaron personas de otras regiones, incluyendo una delegación de la organización Sociedad Civil Las Abejas (municipio de Chenalhó, en Los Altos de Chiapas, otra zona particularmente afectada por la violencia a finales de los 90s). El coro de las Abejas participó con canciones mientras un grupo de jóvenes de esta misma organización presentó una obra sobre la masacre de Acteal (1997).
Luego de la celebración religiosa y de la obra, los participantes en el evento peregrinaron hasta un pequeño panteón donde están enterrados algunas de las víctimas de la violencia y allá oraron y dieron su testimonio los familiares de los muertes y desaparecid@s, otras víctimas (pasadas y actuales), así como invitad@s a la celebración. Cuatro mujeres de Jotalá hablaron por ejemplo sobre como ellas están viviendo hoy en día la violencia por parte del gobierno. Un habitante de la comunidad Nuevo Retorno dio su palabra narrando como los que estuvieron desplazados de Miguel Alemán, bastión de Paz y Justicia en su momento, se reubicaron en 2002 a Nuevo Retorno después de haberse quedado por años en Masojá Shucjá.
Toda la conmemoración era un llamado a mantener la memoria viva y a seguir exigiendo justicia para las víctimas: Romeo Pérez Pérez, Minerva Guadalupe Pérez Torres, Mateo Hernández López, Juan Ramirez Torres, Hector Pérez Torres, Encarnación Pérez Pérez, Maria Rebeca Pérez Pérez y Sebastián Pérez López, en el caso de los caídos en Masoja.
Una lona explicaba lo que pasó de la manera siguiente:
En este lugar, donde cruzan las aguas, hace quince años, el gobierno mexicano comenzó a aplicar la violencia en las comunidades por medio de una coordinación entre los militares, con la organización paramilitar Paz y Justicia. Así el gobierno mexicano hizo una política de muerte en nuestra región Ch´ol de la zona Norte.
Nuestra comunidad fue cercada y nuestros hermanos y hermanas emboscadas, desaparecidas y ejecutadas. Nos cercaron para que sufriéramos hambre, miedo y nos desorganizamos. Así ellos trajeron la muerte.
Ahora nosotros y nosotras por medio de nuestra oración, nuestra celebración, guardamos nuestra memoria y creamos vida. Nuestra memoria es contra el olvido, es por la justicia verdadera y para que no se repitan estos hechos de muerte. En conflicto armado en Chiapas como parte de una estrategia de contrainsurgencia, el gobierno mexicano, incentivó la creación de grupos paramilitares en distintas regiones de la zona del conflicto.
Entre estos grupos paramilitares, destacó por su crueldad y capacidad operativa la organización Paz y Justicia, que operó en el territorio Ch´ol de la zona Norte de Chiapas en los municipios de Salto de Agua, Sabanilla, Tila, Tumbalá, Yajalón y Sabanilla. Esta estrategia contrainsurgente documentada dejó como resultado 122 casos de desapariciones y ejecuciones en el periodo que va de 1995 a 2001 de los cuales 37 son desapariciones forzadas (32 hombres y5 mujeres) y 86 son ejecutados (74 hombres y 7 mujeres).
Todas estas acciones fueron realizadas por Paz y Justicia con apoyo del Ejercito Mexicano (EM) y de la Seguridad Publica con un saldo además de tres mil personas desplazadas forzosamente”.
Para más información:
En Chiapas, la memoria impulsa el caminar (Sididh, 11 de octubre)
Para más información de SIPAZ:
Chiapas: Masojá Shucjá, memoria y exigencia de justicia para las víctimas de los paramilitares del ’95 y ’96, (7 de octubre de 2010)
Chiapas: A 14 años de la desaparición forzada de Minerva Pérez Torres por paramilitares de Paz y Justicia (30 de junio de 2010)
Chiapas : conmemoración en memoria de las víctimas de Paz y Justicia en Masojá Shucjá (3 de septiembre de 2009)
